Abono orgánico para plantas
Abono orgánico deutsch
En la práctica, es común un compromiso entre el uso de fertilizantes artificiales y orgánicos, normalmente mediante el uso de fertilizantes inorgánicos complementados con la aplicación de orgánicos que están fácilmente disponibles, como el retorno de los residuos de cultivos o la aplicación de estiércol.Es importante diferenciar entre lo que entendemos por fertilizantes orgánicos y fertilizantes aprobados para su uso en agricultura ecológica y jardinería ecológica por organizaciones y autoridades que proporcionan servicios de certificación orgánica. Algunos fertilizantes aprobados pueden ser compuestos químicos inorgánicos de origen natural, por ejemplo, minerales... Efectos medioambientales del uso de fertilizantes
¿Cuáles son 5 ejemplos de abonos orgánicos?
Algunos ejemplos de fertilizantes orgánicos naturales son el estiércol, los purines, los humus de lombriz, la turba, las algas y el guano. También se cultivan abonos verdes para añadir nutrientes al suelo. Los minerales naturales como el fosfato de roca de mina, el sulfato de potasa y la piedra caliza también se consideran abonos orgánicos.
¿Cuáles son los 3 ingredientes principales del abono orgánico?
El compost orgánico en bolsas contiene una mezcla de ingredientes orgánicos como estiércol, restos de comida y moho de hojas.
Té de compost
Sin embargo, los buenos abonos orgánicos no sólo alimentan a las plantas, sino que también suelen mejorar el estado general y la salud del suelo. Los abonos orgánicos también nutren a importantes microorganismos del suelo y a las lombrices de tierra.
Es importante elegir un abono que funcione como acondicionador del suelo y también como alimento para las plantas. Si sólo añade alimento artificial para sus plantas, con el tiempo la tierra perderá la materia orgánica que ayuda a retener el agua en el suelo.
Los abonos orgánicos tienen una gama más equilibrada de minerales y nutrientes importantes que los abonos artificiales. Estos ingredientes de apoyo ayudan a que su suelo siga funcionando como un medio saludable que da vida a sus plantas y a los organismos del suelo.
El contenido de N-P-K (nitrógeno, fósforo y potasio) es la clave de todo buen abono. El nitrógeno es especialmente importante porque es probablemente el elemento que más probablemente falte en su jardín.
Los abonos líquidos orgánicos son una forma estupenda de potenciar el crecimiento de las plantas en periodos de grandes necesidades. Las verduras de crecimiento rápido se beneficiarán de los fertilizantes líquidos (pulverizaciones foliares), al igual que los árboles frutales y las plantas con flores. Las algas líquidas son una de las formas más populares de fertilizante líquido.
Abono para plantas de interior
Los abonos orgánicos son fertilizantes producidos de forma natural[1]. Los abonos son materiales que pueden añadirse a la tierra o a las plantas para proporcionarles nutrientes y mantener su crecimiento. Los fertilizantes orgánicos típicos incluyen todos los residuos animales, incluidos los residuos del procesado de la carne, el estiércol, los purines y el guano; además de los fertilizantes de origen vegetal como el compost y los biosólidos[2] Los "fertilizantes orgánicos" inorgánicos incluyen los minerales y las cenizas. El término "orgánico" se refiere a los Principios de la Agricultura Ecológica, que determinan si un fertilizante puede utilizarse para la agricultura ecológica comercial, no si el fertilizante está formado por compuestos orgánicos.
Los minerales pueden extraerse de productos fósiles de la actividad animal, como la arena verde (depósitos marinos anaeróbicos), algunas calizas (depósitos de conchas fósiles),[5] y algunos fosfatos de roca (guano fósil)[6] Añadir piedra caliza o "encalar" un suelo es una forma de elevar el pH. [7] Al elevar el pH de un suelo, se puede estimular el crecimiento microbiano, lo que a su vez aumenta los procesos biológicos, permitiendo que los nutrientes fluyan más libremente por el suelo[8] Cuando los nutrientes fluyen libremente son más accesibles para las plantas y, por tanto, pueden aumentar la salud y la masa vegetal. Si el pH del suelo ya está equilibrado, el encalado sería ineficaz.
Abono de cáscaras de plátano
La jardinería ecológica hace hincapié en cultivar el jardín de modo que mantenga un suelo enriquecedor, plantas e insectos beneficiosos. Esto se consigue evitando el uso de fertilizantes sintéticos y pesticidas, y utilizando productos que nutren el suelo de su jardín y los organismos que contiene. Si adopta la filosofía de la jardinería ecológica, sus plantas disfrutarán de un ecosistema equilibrado y nutrido que funcionará tal y como lo concibió la naturaleza.
Los productos ecológicos son ideales para su jardín, porque alimentan el suelo y crean un entorno sostenible. Un suelo sano da lugar a plantas sanas.1 Pero cuando cultiva un huerto ecológico, hace mucho más que nutrir sus plantas.
Al igual que en la naturaleza, un suelo orgánico vivo con microbios y hongos libera nutrientes lentamente para las plantas. Al enriquecer el suelo con suplementos orgánicos y fomentar el crecimiento de organismos beneficiosos naturales, proporcionas a tus plantas las herramientas que necesitan para acceder a los nutrientes del suelo y la fuerza para protegerse de patógenos y plagas dañinas. Adopte un enfoque natural y enmiende con acondicionadores del suelo, como los excrementos de lombriz, que añaden materia orgánica, incluido el ácido húmedo, y microorganismos deseables al suelo de su jardín. Esto ayuda a que los nutrientes del suelo, como el hierro, estén más disponibles para las plantas.2
